La diferencia entre querer ayudar y poder ayudar

El mito del "debo ayudar a otros": sanando desde adentro para trascender

En el camino de la búsqueda personal, muchos caen en la trampa del "debo ayudar a otros". Creen que su sanación y desarrollo personal están ligados a servir a los demás, sacrificando su propio bienestar en el proceso. Esta creencia, si bien noble, puede ser un obstáculo para alcanzar la verdadera sanación y trascendencia.

Sanar para uno mismo, no por los demás:

La sanación no debe ser un acto de sacrificio o un medio para buscar aprobación. Es un proceso personal que busca liberar patrones de comportamiento nocivos y encontrar el equilibrio interior. Cuando sanamos para nosotros mismos, no solo dejamos de proyectar esas heridas en nuestras relaciones, sino que también nos convertimos en modelos de sanación para quienes nos rodean y definitivamente no lo hacemos por posibles clientes o personas aún desconocidas.

El poder de la autenticidad:

Cuando sanamos por nosotros mismos, lo hacemos con autenticidad y sinceridad. Abordamos nuestras heridas sin buscar recompensas ni aplausos externos. Esta autenticidad se refleja en nuestras acciones y atrae a personas que admiran nuestra esencia y la forma en que hemos superado nuestras dificultades.

Monetizar la sanación personal:

La monetización de nuestros talentos y habilidades no está reñida con la sanación personal. De hecho, compartir nuestro camino de sanación con el mundo puede ser una forma poderosa de ayudar a otros y generar un impacto positivo. Sin embargo, esta monetización debe basarse en la autenticidad y la pasión, no en la búsqueda de aprobación o recompensa, porque al hacerlo así, por más que te quieras vender distinto, todos te veran como lo que eres, un vendehumos..

Atraer lo que refleja nuestra verdad:

Cuando vivimos en la verdad de quiénes somos, atraemos a personas y experiencias que resuenan con nuestra esencia. No somos marionetas de la aprobación externa, sino individuos que han superado sus obstáculos para convertirse en la mejor versión de sí mismos.

Vivir el cielo en la tierra:

Al sanar para nosotros mismos, dejamos de lado la búsqueda de aprobación externa y nos enfocamos en nuestro propio bienestar y crecimiento. Esta liberación nos permite experimentar una profunda satisfacción y paz interior, creando un "cielo en la tierra" donde la felicidad y la plenitud son la norma.

En resumen: